"EL EGO,FALSA IDENTIDAD"
"LA OSCURIDAD ES LA LUZ QUE NO VES"
MI APLICACIÓN.
jueves, 11 de octubre de 2012
miércoles, 9 de mayo de 2012
miércoles, 28 de marzo de 2012
lunes, 5 de marzo de 2012
viernes, 2 de marzo de 2012
domingo, 20 de noviembre de 2011
sábado, 2 de julio de 2011
jueves, 31 de marzo de 2011
lunes, 21 de marzo de 2011
sábado, 12 de febrero de 2011
miércoles, 19 de enero de 2011
Respira con la Tierra
domingo, 16 de enero de 2011
Un sólo momento...(Sabiduría Zen)
Un monje zen había sido sentenciado a muerte. El rey del país lo llamó y le dijo: -"Sólo tienes veinticuatro horas; ¿cómo vas a vivirlas? El monje se rió y contestó: -"Momento a momento; tal como siempre he vivido! Para mí nunca ha habido más que este momento, así que ¿qué más da si me quedan veinticuatro horas o veinticuatro años? Eso es irrelevante. Yo siempre he vivido momento a momento, así que un momento es más que suficiente para mí. Veinticuatro es demasiado; un momento es suficiente". El rey no podía comprenderlo. El monje le dijo: -"Señor, déjeme preguntarle algo: ¿puede usted vivir dos momentos simultáneamente?. -Nunca nadie lo ha hecho. La única forma posible es vivir un solo momento, pero si estás absorto en el Pasado y seducido por el Futuro, no te será posible "Atraparlo".
Autor desconocido
martes, 11 de enero de 2011
lunes, 3 de enero de 2011
EL DON DE PODER AMAR
Si yo te amo y tú no me amas ¿qué sucede? Que mi amor no te aporta felicidad, no te produce ningún efecto e incluso puede ser una incomodidad para ti.
Pero si con mi amor despierto tu amor ¿qué sucede? Que eres maravillosamente feliz porque me amas. No porque yo te ame sino porque tú me amas. Cierto, mi amor quizá ha despertado tu amor pero lo que te hace feliz es tu capacidad de amar, es que tú amas.
Cuando pensamos en el amor, el aprendizaje de nuestra mente nos lleva a creer que es algo que van a venir a darnos, algo que está fuera de nosotros y tenemos que buscarlo pero esto no es así y cuanto más lo busquemos fuera menos podremos encontrarlo donde realmente está: en tu interior.
El amor es un don que tú tienes dentro, es un poder, una maravillosa fuerza que vive dentro y cuando realmente eres feliz, es cuando se expresa a través de ti, cuando abres la puerta de tu corazón y dejas que su dulce néctar se extienda por tu sangre, por tu mente y por tu cuerpo.
Cierto que cuando tu amor sale de ti y baña al otro al mismo tiempo que el amor del otro te baña a ti, ambos estáis empapados en una fuente de luz que hace posible esa intimidad y ese éxtasis de los amantes iluminados.
Cierto. Esto es realmente maravilloso pero lo que para ti hace posible esa maravilla es que realmente puedas amar, que el poder del amor nazca también en ti porque tan sólo el amor de la otra persona no basta, es absolutamente necesario el tuyo para que puedas ser feliz.
Darte cuenta de esto es muy importante porque entonces comienzas a orientar debidamente la energía, vas en el camino correcto hacia tu propia felicidad.
Tan empeñados estamos en que nos amen que somos incapaces de amar
La mayoría de las personas van por el camino contrario y están tan empeñados e incluso tan atascados en la exigencia de que sea el otro quien les ame, quien les comprenda, quien se adapte, se acerque y perdone que, llevando su energía por el camino opuesto, son incapaces de amar esperando que el otro les ame, No comprenden que lo que realmente nos hace grandes y felices es cuando podemos amar, comprender, aceptar y perdonar al otro.
Ni tu amor, ni tu inteligencia, ni tu grandeza me hace grande a mí sino mis propios dones y esa grandeza mía es lo que únicamente me puede hacer feliz.
Tan empeñados estamos en ser amados y comprendidos que somos incapaces de amar y esto es porque estamos totalmente equivocados y vamos en dirección contraria a la Felicidad.
martes, 28 de diciembre de 2010
viernes, 24 de diciembre de 2010
El árbol del deseo.
Una vez un hombre estaba viajando y entró al paraíso por error. En el concepto indio del paraíso, hay árboles que conceden los deseos. Simplemente te sientas bajo uno de estos árboles, deseas cualquier cosa e inmediatamente se cumple no hay espacio alguno entre el deseo y su cumplimiento.
El hombre estaba cansado, así que se durmió bajo un árbol dador de deseos. Cuando despertó, tenía hambre, entonces dijo: “Tengo tanta hambre! Ojala pudiera tener algo de comida”. E inmediatamente apareció la comida de la nada simplemente flotando en el aire, una comida deliciosa.
Tenía tanta hambre que no prestó atención de dónde había venido la comida. Cuando tienes hambre, no estás para filosofías. Inmediatamente empezó a comer y la comida estaba tan deliciosa! Una vez que su hambre estuvo saciada, miro a su alrededor. Ahora se sentía satisfecho. Otro pensamiento surgió en él: “Si tan sólo pudiera tomar algo!” Y por ahora no hay ninguna prohibición en el paraíso, de modo que de inmediato apareció un vino estupendo.
Mientras bebía este vino tranquilamente y soplaba una suave y fresca brisa bajo la sombra del árbol, comenzó a preguntarse: “¿Que está pasando? ¿Estoy soñando o hay fantasmas que están jugándome una broma?” Y aparecieron fantasmas feroces, horribles, nauseabundos. Comenzó a temblar y pensó: “Seguro que me matan!” Y lo mataron.
Esta es una antigua parábola, de inmensa significación. Tu mente es un árbol dador de deseos: pienses lo que pienses, tarde o temprano se verá cumplido. A veces, la brecha es tan grande que te olvidas por completo que lo deseaste, de modo que no puedes reconocer la fuente. Pero si observas profundamente, hallarás que todos tus pensamientos te están creando a ti a tu vida. Crean tu infierno, crean tu cielo. Crean tu desgracia y tu alegría, lo negativo y lo positivo… Cada uno es aquí un mago. Cada uno está hilando y tejiendo un mundo mágico entornos de sí mismo,,, y luego es atrapado. La araña misma es atrapada en su propia tela. No hay nadie que te torture excepto tú mismo. Y cuando se comprende esto, las cosas comienzan a cambiar.
Entonces puedes modificarlo, transformar tu infierno en cielo; sólo se trata de pintarlo con una visión diferente… toda la responsabilidad es tuya. Y entonces surge una nueva responsabilidad: puedes dejar de crear el mundo. No hay necesidad de crear ni en el cielo ni en el infierno, no hay ninguna necesidad de crear nada. El creador puede descansar, jubilarse. Y la jubilación de la mente es la meditación.
Cambia tu infierno,
conviértelo en un
rosal en flor,
mira lo bueno,
canta a la primavera,
siente tu música,
danza con los árboles,
sonríele a las estrellas...
y
algún día,
toda la vida responderá
a tu canto,
y en las sombras
nacerán madreselvas,
la nube se tornará sol,
y las estrellas
te devolverán
la sonrisa perdida.